Estuvimos en Centro Cultural España para disfrutar de la función especial de Delirium Pollum como parte del 9° Festival de Pantomima Circo y Clown, y aquí les tenemos todos los detalles...
Delirium Pollum, una propuesta escénica que propicia el fértil encuentro entre el circo y el teatro. Un espectáculo de humor a veces hilarante, a veces sarcástico, otras veces ingenuo, que conforme avanza va adquiriendo una pátina de conmovedor dramatismo. En este espectáculo unipersonal que prescinde de la palabra y le asigna gran importancia al aspecto visual, Andrea Christiansen y Gervais Gaudreault, crean metáforas que transgreden las fronteras entre lo real y lo imaginario.
Dramaturgia: Andrea Christiansen. Dirección: Gervais Gaudreault Elenco: Andrea Christiansen, Nadia Zuñiga, Genaro Ochoa.
Nuestra reseña...
DELLIRIUM POLLUM, el arte del clown en la cotidianidad.
“Porque a los payasos no nos toman en serio”, expresó “Pimpolina” el personaje que encarna la argentina Andrea Christiansen en Dellirium Pollum. Y es que detrás de sus narices rojas, se esconde una situación complicada, que si bien es cierto es un mal del que sufren todos los artistas: lograr sobrevivir con bajos sueldos, sin garantías de calidad de vida, entre otras cosas a las que se enfrentan en esta profesión. Me pareció relevante empezar estás líneas desde ese punto que siempre queda simplificado.
Definidamente el arte clown es flexible, se adapta a diferentes espacios y formas del teatro. Pero el logro más importante en este caso, para mi y viendo la retroalimentación de lo que trasmitió la obra de Christiansen, es culturizar a los niños sobre la importancia de apropiarse del arte e introducirlo en sus vidas. Lo digo después de escuchar a una niña discernir sobre una escena que a juicio de ella era mejor que la otra por estar mejor elaborada. Un acierto total es la entrada gratuita, que permitió que varias familias asistieran a la función, que por cierto contó con un gran trabajo de producción, totalmente atractivo para la cantidad de niños que asistieron, sobre todo por la manera en que la actriz compenetró con el público. Por otra parte, la actriz convirtió la cotidianidad en diversión. Salir de la realidad atravesando otro plano más allá del que podemos ver estando en cualquier lugar como un baño, por ejemplo.
No hay excusa para no apoyar con su asistencia el noveno Festival de Pantomima, circo y clown. Se trata de eventos gratuitos en los que podemos conocer cómo se ha desarrollado este arte en México y la participación de las mujeres que hacen parte del gremio.
