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Maria Juliana Vargas

Best of Antinavideños.

Los cuentos antinavideños son textos dramáticos que consisten en confesiones a partir de una sola voz sobre algún acontecimiento ¾ devastador para el personaje, cómico para el espectador-¾ alusivo a la época navideña. Se caracterizan por su humor negro y su manejo del suspenso. No se trata de un texto común que use de pretexto a la época navideña, sino de un acontecimiento específico de dichas festividades que determine de forma contundente al personaje en cuestión. El cuento no es un sketch ni una pastorela y debe ser abordado desde un solo personaje. El tema antinavideño es libre.


Desde hace 13 años, se han montado: Ángeles Exterminadoras de Yvan Bienvenue en 2003 y 2004; Tercera temporada de Ángeles Exterminadoras y Antinavideños Anónimos en 2005; Cuentos Negros de Navidad en 2006; No apto para menores en 2007; Perversiones en el pesebre en 2008, Pandemia Antinavideña en 2009; Antinavideños 2010, Esperpentos Antinavideños en 2011; Apocalipsis Antinavideños en 2012, Década Antinavideña en 2013, Antinavideños 014.911 en 2014 y Negra Antinavidad en 2015. Gracias a la continuidad de este proyecto, durante las últimas semanas de diciembre, una comunidad de fanáticos que escuchar historias vergonzosas, indecibles de todo tipo de acontecimientos ocurridos durante dichas fiestas, con sarcasmo y humor negro.


Reseña...


Dicen que la navidad es la época más feliz del año. La gente en la calle sonríe, se reúne con sus familias y amigos, se respira un aire de bondad, de calidez. Las luces de colores parpadean al ritmo de canciones de paz, amor y buenos deseos. Y todo el mundo se prepara para vivir el último mes del año con intensidad.


Y en ese “mood” fui el lunes a La Capilla, caminé contenta por volver al teatro, sentía la brisa decembrina. Entro y el anuncio decía: Best of Antinavideños. Celebramos13 años de odiar la navidad, ¿Qué? ¿Cómo puede alguien odiar la navidad? ¿Porqué alguien va a decirme que en realidad la pasa mal en esta época que es sólo amor, abrazos y sonrisas? Me indigné.

Pero ese sentimiento duró poco. Qué delicia ver historias tan bien contadas, tan bien actuadas. Sucesos que acontecen en esta época pero que hacen pensar dos veces en el trasfondo, en lo ridículos que somos a veces cuando nos dejamos llevar por la mercadotecnia, por los patrones de comportamiento establecidos, por lo que se supone que tiene que ser, que debemos sentir o procurar en ciertos momentos de año.


El orgullo de la familia,Twinkle, twinkle little star, Batman Claus y Dios de porcelana fría, son las cuatro historias que conforman esta obra dirigida por Angélica Rangel, bajo la dirección general de Boris Schoemmann y están cargadas de un humor negro extraordinario, una puesta en escena cuidada, con los elementos estrictamente necesarios para crear el ambiente sin perder el foco del actor y en el texto, una propuesta que vale la pena ver, pensar y disfrutar.


Ernesto, un hombre que en realidad es pavo, es el protagonista del primer cuento, de Itzel Lara, El orgullo de la familia con Mario Alberto Monroy. Es la noche de navidad y se lo van a comer. Es su destino por ser pavo y él lo admite y asume con su “orgullo pavístico”. Se revela así la vida de un hombre que se auto descubre en la época navideña de su niñez tras un trágico suceso y que vive amparado por esa idea que lo reconforta, lo aísla y finalmente lo resguarda de un mundo que no quiere o no reconoce porque lo alejaría de su madre y, peor aún, de él mismo.



Twinkle, twinkle little star de Isaac Velasco, con Carmen Ramos, revela maravillosamente la situación de una actriz que trabaja como botarga en épica navideña. Qué sarcástico, qué incomprensible, qué subvalorado su oficio. Qué necesidad de ser y estar para el otro olvidando o ignorando la vida propia, las preocupaciones, las inconformidades. Qué divertida e irónica manera de poner en escena la realidad de muchos artistas que tienen en navidad “un poco más de trabajo” sólo porque se debe alimentar el deseo mercantil, las compras, el gasto desmedido.


Y aparece en escena Batman, quien esta vez y gracias a la creación de Luis Guerrero y encarnada por Miguel Conde, es Batman Claus. Tiene una misión secreta y especial para Navidad: debe luchar, como siempre, contra todos los villanos para cumplir un sueño de navidad que finalmente considera patético, nefasto, ridículo e hipócrita. Él siempre en su pose, porque es lo que debe hacer, pero en un afán único de reconocimiento, de cumplir con lo debido, lo establecido a pesar de que no sea el anhelo natural o una búsqueda verdadera y sincera, como muchas veces se nos enseña que debemos vivir para encajar, para ser pieza del engranaje social.


Finalmente Ginés Cruz nos hace vivir la historia más miedosa y chistosa de navidad. El texto de Mario Alberto Monroy nos lleva por una aventura casi terrorífica de apariciones, misterios y venganzas de personajes que nunca en la vida hubiéramos pensado que harían tales cosas: Pitufo burlón y el niño Dios de porcelana del nacimiento. Una historia que nos habla de la cada vez más “precoz” navidad, de esos recuerdos navideños que calan en nuestra vida desde chicos y hacen que, año tras año se repita el sentimiento, la angustia. De la paranoia, de los miedos, de las manifestaciones que relacionamos y que nos generan ansiedades y que finalmente convertimos en verdades y realidades.


Esta obra, reflejo de una muy buena dramaturgia contemporánea

mexicana, estará hasta el 30 de diciembre en el Teatro La Capilla y es perfecta para amantes y no amantes de la navidad... de lunes a viernes de 6:30 a 8:00pm, sábados de 6:00 a 7:00pm y domingo de 5:00 a 6:00pm. A partir del 19 de diciembre el precio general es de $250 y el descuento sólo aplica para estudiantes, maestros, jubilados e Inapam con credencial vigente.


Felices fiestas para todos. Todos.

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